Brasil & es reconocido internacionalmente como la nación con mayor biodiversidad del planeta. En Bahía, tenemos el Archipiélago de Tinharé, que conforma el municipio de Cairu (ubicado en el Bajo Sur del estado), y en él la Isla de Boipeba, rodeada por un lado por el océano y por el otro lado del Río. Do Inferno dotado de una exuberante belleza natural. La región está reconocida por la UNESCO; como Reserva de la Biosfera y Patrimonio de la Humanidad.
La exuberancia del lugar atrae a miles de personas cada año, promoviendo el turismo y contribuyendo al desarrollo y mantenimiento de la economía de la ciudad. Como principal fuente de ingresos para la población local, la práctica debe repensarse continuamente para que sea viable no solo financieramente, sino también para garantizar la salud del medio ambiente.
El país aún está dando pequeños pasos en materia de Turismo Sostenible, pero el concepto ya está establecido en los planes de negocios de las grandes empresas e incluso de las de menor tamaño. También se nota la preocupación de trabajar para concienciar a la gente común sobre la necesidad de preservar la flora y fauna local, independientemente de tener el turismo como materia prima.
En Boipeba la población autóctona es consciente del paraíso donde vive y tiene sobrados motivos para cuidar este verdadero santuario ecológico. Así, existen movimientos independientes en la isla para la preservación y cuidado de los recursos naturales que trabajan en la recolección y reciclaje de residuos, por ejemplo. También existe una asociación de pescadores que, además de sacar su alimento y sustento del mar, inspecciona a los vecinos y transeúntes evitando acciones contaminantes.